Persigo mis pies errantes que no
duermen por caminar y, aunque acampe
la noche oscura en el arenal, vas por la
sierra, rasando dunas y pastos.
Has mudado de tu pecho el almendro,has
desechado las estrofas que de tu corazón
emanaban los versos en flor, abandonaste la
huerta donde manaba la vertiente de finas melodías.
desechado las estrofas que de tu corazón
emanaban los versos en flor, abandonaste la
huerta donde manaba la vertiente de finas melodías.
Se escapó el color de sus atuendos, silenciosa
desgranaste de tus vestiduras el amor,
te marchaste llevando solamente en el
costado la amargura que apura tu carrera;
el soplo que jadeas los pulsos que te rompen,
vas en contra del viento seco y duro que
en el lomo te golpea.
desgranaste de tus vestiduras el amor,
te marchaste llevando solamente en el
costado la amargura que apura tu carrera;
el soplo que jadeas los pulsos que te rompen,
vas en contra del viento seco y duro que
en el lomo te golpea.
Pero por más que camines, vuelves la vista
atrás donde el alma se despidió en
silencio del Amor dejando cada uno de tus
sentires.
atrás donde el alma se despidió en
silencio del Amor dejando cada uno de tus
sentires.
¿Huir?
Si, en el sentimiento del alma, si en la esencia
de tu amor viviente, si en el eco de la esperanza,
solo hay un camino que recorrer, no hay más
que un destino que volver a cobijarme dentro de ti.
Si, en el sentimiento del alma, si en la esencia
de tu amor viviente, si en el eco de la esperanza,
solo hay un camino que recorrer, no hay más
que un destino que volver a cobijarme dentro de ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario