Te busco,
sin embargo, no te encuentro...
Pero
estas aquí,
en el sonido de tu voz
que se a quedado inmerso en cada
espacio de mi cuarto,
me dice que no te has ido.
Te busco,
sin embargo, no te encuentro...
Pero
Estas aquí,
en las partículas de mi piel,
en el calor que estalla
en mil pétalos
de rosas, cuando el éxtasis de
la noche eterna me
provoca tu pasión
Te busco,
sin embargo, no te encuentro...
Pero
estás aquí,
caminando libremente
en la vereda de mi vida
y habitas en mis
recuerdos perennes.
Te busco,
sin embargo no te encuentro...
Pero
Estas aquí,
jugando en las curvas
que forma mi pluma
en la nueva estrofa
de un poema que va a nacer. 
Te busco,
Te busco,
sin embargo no te encuentro...
Pero
Estas aquí,
en las palabras que plasmo
con la tinta de tus besos,
con el suspiro de mi alma
Te busco,
sin embargo no te encuentro...
Pero
Estas aquí
en las alas de mis sueños,
en el almendro de la primavera,
en las tardes de agosto
y
en las nevadas noches de diciembre.
Yo se que estas aquí.
(Mary Salinas)<
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